martes, 11 de mayo de 2010

ECTOPARASITOSIS
Sarna o Escabiosis
Dra. María Luján Schierenbeck
La Sarna o Escabiosis es una enfermedad parasitaria infecto-contagiosa, polimorfa y pruriginosa.

Es producida por un ácaro, el sarcoptes sacbiei var. hominis (cuerpo ovoide, aplanado dorsoventralmente, color blanquecino, con región dorsal cubierta de cerdas) que afecta la piel humana y de otros mamíferos existiendo especificidad de especie. Son arácnidos muy pequeños, miden 0,2-0,4 mm, viven en la piel y con sus quelíferos, piezas bucales utilizadas para morder, excavan túneles paralelos a la superficie cutánea. Las galerías excavadas por las hembras adultas son más largas que las del macho y constituyen cuevas permanentes donde depositan alrededor de 24 huevos relativamente grandes. La larva de 6 patas emerge alrededor de los 4 o 5 días y migra hacia la piel refugiándose en los folículos pilosebáceos, donde después de dos estadíos ninfales de ocho patas, llega a la adultez. Las hembras jóvenes se aparean, la fecundación ocurre en la superficie de la piel, después de la cópula el macho muere, la hembra se introduce en el estrato córneo de la piel y comienzan a perforar nuevos túneles, esta va dejando los huevos a medida que penetra en la piel (2 a 3 huevos por día) en total 30 a 50 huevos, finalmente muere en el túnel a las 4 a 6 semanas. Los huevos eclosionan y las larvas emergen a la superficie de la piel, se transforman en ninfas en 3 a 8 días y posteriormente en adultos en 12 a 15 días. Las formas contagiosas son la ninfa y los adultos. Los adultos viven aproximadamente un mes; la sobrevida fuera del huésped en condiciones favorables de temperatura y humedad puede ser de 10 días.
La transmisión se hace en forma directa (de persona a persona) o a través de fomites (toallas, sábanas, ropa interior).


Síntomas
El principal síntoma es el prurito, que aumenta su efecto durante las noches y con el calor. El prurito está causado por la reacción alérgica del cuerpo ante el parásito.
El prurito no se observa en el primer contacto con el parásito, deben transcurrir unos días para que la población de ácaros aumente y el huésped se sensibilice.
En este período los pacientes se constituyen en portadores asintomáticos.
El número de ácaros no se relaciona en forma directa con la cantidad de lesiones, pero las personas con buenos hábitos higiénicos suelen tener muchas menos.
La erupción es polimorfa. Las lesiones específicas, provocadas en forma directa por el parásito, son los túneles o galerías (líneas grisáceas y sinuosas de 1 a 15 mm de largo, que son el reflejo exterior de una galería excavada en la epidermis por la hembra con el fin de desovar), y las vesículas perladas acarianas, del grosor de una cabeza de alfiler, producidas por la secreción del parásito. Las lesiones que predominan en las muñecas, las caras laterales de los dedos y de las manos, los codos, las aréolas mamarias y el escroto, se extienden a todo el cuerpo. Las lesiones inespecíficas son producidas por el rascado y la sensibilización al ácaro o sus productos y predominan en el abdómen, las nalgas, la cara interna de los muslos y las axilas; mientras las lesiones inespecíficas se presentan como erosiones o costras lineales, las hiperérgicas lo hacen como pápulas, vesículas, ronchas o nódulos. Las vesículas y/o vesículo-pústulas se ven especialmente en las palmas y las plantas de los neonatos y lactantes. Los nódulos son formaciones pardo-rojizas, muy pruriginosas, deshabitadas, generalmente ubicadas en sitios cubiertos y pueden persistir semanas o meses después del tratamiento.


Complicaciones
Las complicaciones de la sarna son la eccematización y la infección bacteriana de las lesiones por Staphylococcus aereus y Streptococcus pyogenes.


Diagnóstico
El diagnóstico es clínico y se basa en el polimorfismo lesional y la distribución de las lesiones. En caso de dudas, el raspado de un túnel con bisturí permite obtener un material que observado al microscopio revela la presencia de huevos, excremento o restos del ácaro.


Tratamiento
La terapéutica se inicia brindando a los padres una clara información sobre la enfermedad para contar con su colaboración, sobre todo en la ejecución del tratamiento familiar simultáneo y la adquisición de hábitos higiénicos. Si existe eccema o infección agregada deben tratarse en primer término, y luego siguiendo el ciclo evolutivo del parásito, se aplicarán sobre la piel los preparados elegidos, los días 0, 5 y 10, después del baño nocturno, distribuyéndolos del cuello para abajo en los adultos, y también el cuero cabelludo en los lactantes muy pequeños. Se recomienda el cambio, lavado y planchado de la ropa personal y de cama los días que se efectúa el tratamiento.
En menores de 1 año o mujeres embarazadas se utiliza azufre al 4-6% en vaselina, en niños mayores y adultos se utiliza permetrina al 5% en crema.
La ivermectina está aprobada para uso en niños > de 5 años o con peso > 15 kg. Dosis oral: 200 µ/kg. Dosis tópica: 400 µ/kg.

No hay comentarios:

Publicar un comentario